Ser niña y ser bella

Ponele aritos ¡Porque sino parece varón!
Apenas entre en la pubertad, enséñale a depilarse. Sino, ¡Es un asco!
¿No le crecieron tetas? Mejor que se opere. «Sin tetas no hay paraíso» y si andas como tabla pareces un varoncito.
Cuando tenga la primera cana, ¡Tintura! No vayas a parecer una vieja o abandonada.
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¿Qué otras herramientas de control de los cuerpos vamos permitir?
¿Cuánto más tiene que dolernos cumplir con el ideal de belleza hegemónica?
¿Vamos a seguir reproduciendo estos mandatos y criando niñas que se sientan naturalmente imperfectas?
¿Cuál es la necesidad de que dejar en claro y manifiesto a qué género pertenecemos?
¿Vamos a seguir pensando que usar aros es sólo cosa de niña?
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Cuando nació mi hija mayor también le puse aritos, como lo hicieron conmigo. No me lo cuestioné. Pasaron los meses: se perdían, se le salían y cuando tuvo 2 años me dijo mamá me duele con la ropa (se le enganchaban al sacarle la remera por ej). Ahí le pregunté ¿Y si los sacamos? ¡si! Nunca más uso ni pidió por el momento. Si los pide, le explicaremos qué implica y la acompañaremos a hacerlos. Antes quiero que sepa que nos quieren controlar, hacer encajar en moldes todos iguales. Que sepa que los aritos no la definen niña y que los varones tambien pueden usar.
Que tenga opciones. Que elija depilarse si quiere pero que no se sienta obligada a hacerlo y que no le den asco sus pelos.
Que elija las tinturas si quiere, si le gusta, pero que no se sienta horrible si no lo hace.
Que elija ella misma que partes de su cuerpo quiere perforar, por deseo no por mandato.

¿Ustedes? ¿Se sintieron exclavas del mandato de belleza?


Lic. Carolina Mora

Mail lic.carolinamora@gmail.com