Transitar el duelo de la mama de uno,
Para re nacer como mamá de dos (o más).
Con cada nuevo nacimiento, también nace una nueva versión de mamá en nosotras.
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Con este nuevo bebé que llega a casa, también llega una nueva mamá.
Quizá todavía no somos muy conscientes y al comienzo solamente creemos que somos la misma, sumando un nuevo hijo/hija.
Pero ¿Cómo ser la misma si ahora estamos divididas?
¿Si ahora, convivimos con dos pedidos a la vez?
¿Si vemos al mayor o la mayor reclamar ante este cambio?
Quizá, el estrés de los primeros meses de maternidad doble tenga que ver sobretodo con eso: entender que desde ahora, vamos a fallar un poquito más.
Desde que se amplia está familia, alguien siempre va a tener que esperar un rato más.
Y seguramente haya siempre algo que no vamos a llegar a hacer en el día (si es que ya no lo había).
Y alguien que se quede con ganas de jugar o pasar más tiempo con mamá (o nosotras extrañemos el tiempo exclusivo con alguno de los hijos).
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El duelo por nuestra versión de mamá de uno, no es más que una transición, una nueva metamorfosis en nuestra identidad que debemos atravesar.
¿Acaso nos mintieron cuando nos dijeron que es más fácil la segunda vez?
Quizá un poco si, un poco porque no hay generalidad que sirva para cada caso y otro poco porque no nos hablaron de la culpa que se vive en el camino.
Es mentira que «se crian solos».
Pero también quizá un poco no, porque «la parte más gruesa» de construir nuestra identidad de madre (entre otras) ya está transitada.
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De este nuevo caos, de tiempos, necesidades y deseos, re nacemos.
Darse tiempo, hacerse espacios, hablar, llorar, reír, enojarse y volver a abrazarse.
Esto también pasará, pero de seguro mucho aprendizaje dejara
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¿Cómo vivieron está «segunda vuelta» ?

Lic. Carolina Mora
Mail lic.carolinamora@gmail.com
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