¿Hace cuánto no jugas con tu hijx? Jugar de verdad, tiradxs en el piso, riéndote en serio, metida en la historia, inventando, queriendo ganar a toda costa, divertida, involucrada…
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Hoy jugamos con mi hija de verdad después de muchos días. Yo creía que estaba jugando antes, cuando ella me decía «dale mamá, juguemos a…»
Resulta que no: yo estaba pensando en las cuentas por pagar, en llegar a fin de mes. Estaba pensando en que haría de cenar, en sí había dado ese turno que me pidieron…. Estaba pensado cuánto tiempo más faltaba para terminar e ir a colgar la ropa, estaba ocupándome de mi hijo menor …
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Cuando se tienen dos o más hijxs es difícil pasar tiempo con uno solo. Y desde que nació Julián los momentos con Cata exclusivos creo que no llegan a completar los dedos de una mano, porque a pesar de creer que le estaba prestando atención, su hermano estaba presente, la demanda es doble y la atención compartida.
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Ahora ya casi llegando a sus 7 meses de vida, estoy tratando de instaurar la rutina de pasar un tiempo a solas con Cata. Sin Julián y sin celular ( otro motivo de distracción).
Intentando que mis preocupaciones y problemas queden de la puerta para afuera de su habitación. No es nada sencillo. Cuesta y mucho. Debo asumir que a veces me aburren los juegos, entonces ahí intento proponer alguna variación que lo haga más atractivo. Busco conectar con aquello que me divierte a mí para volcarlo en el jugar. Trato de sostener la atención plena en ese momento presente, enfocarme en la sonrisa de mi hija.
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¿Cómo es que algo tan espontáneo como disfrutar de jugar con lxs hijxs cuesta tanto a veces? El cansancio, las preocupaciones, la desconexión con nuestra propia capacidad de jugar…
Vale la pena intentarlo. Porque se disfruta, ¡y mucho!
Lic. Carolina Mora
Mail lic.carolinamora@gmail.com
carolinamorapsicologa.com 